Cada fin de
año vivimos procesos similares, nos reunimos con la familia; expresamos cariño
y enviamos saludos a personas con las que nos vinculamos durante el año de una
u otra manera; reflexionamos en lo bueno y lo malo. Lo hacen los noticieros, los
programas de radio y televisión, los ministerios, pastores e iglesias.
Y es bueno
tomar un tiempo de análisis de saber qué estuvo bien, excelente, o no tanto, y
qué nos faltó por hacer, tal vez un poco
más de tiempo, más dedicación a algo, más esfuerzo, más conversaciones de
nivel.
Como UNIDAD
DE MINISTERIOS INFANTILES DE CHILE (UMICH) y como su directora, quisiera en esta
oportunidad en nombre de cada integrante de la mesas de UNIDAD que se han
conformado, simplemente agradecer: Primero a DIOS por su fidelidad y respaldo
en lo sobrenatural. Gestó contactos,
abrió puertas, movilizó a personas en un mismo sentir y suplió recursos para
llevar a cabo varios desafíos:
Abrir UMICH
V región, avanzar en UMICH Talagante, cursos de Capacitación y charlas a
iglesias de distintas denominaciones, una página web, la ofrenda de un espacio
radial, participación en la televisión con temáticas de niñez, desayunos para pastores y líderes de niños y un Congreso
que reunió a liderazgo del norte y sur del país.
También
quiero agradecer a quienes apoyaron. En primer lugar al EQUIPO, presente en mil y una reuniones. Ellos son UMICH ¡gracias por estar y creer en este proyecto!
A quienes
ofrendaron tiempo, recursos y dedicación; a quienes oraron por cada uno de
nosotros y por los proyectos que se planificaban.
También a
quienes asistieron a las distintas capacitaciones, ya que, nos hicieron sentir
la mano de Dios diciendo “¡Vamos! Sigan adelante!”
A quienes
nos escribieron palabras de ánimo y bendición que, definitivamente, llegaron en
tiempo oportuno.
A los
ministerios con los que trabajamos este año en alianza.
Agradecer a
los pastores que dejaron a sus líderes capacitarse a través de
UMICH y continuar creciendo como obreros
aprobados en la labor con la infancia.
Pastores que oraron por nosotros, que nos llamaron para bendecir nuestra labor; Pastores que creen y que han tomado la niñez como un nuevo desafío en sus iglesias con el fin de alcanzarlos con el evangelio de Jesucristo, levantarlos y potenciarlos como agentes de transformación (Ventana 4/14).
Pastores que oraron por nosotros, que nos llamaron para bendecir nuestra labor; Pastores que creen y que han tomado la niñez como un nuevo desafío en sus iglesias con el fin de alcanzarlos con el evangelio de Jesucristo, levantarlos y potenciarlos como agentes de transformación (Ventana 4/14).
¡Gracias a las
familias detrás de cada miembro de UMICH! que entendió y respaldo cada reunión y tiempo dedicado a favor del Reino de
Dios. (Hago mención especial a mis hijos de 8 y 9 años que nos acompañaron a
cada reunión y mi esposo parte valioso en este equipo)
A líderes
del extranjero que conocen lo que hacemos, nos apoyan, y nos han asesorado y
guiado en muchas oportunidades. ¡Gracias por sus consejos, oraciones y palabras
de aliento!
Sólo puedo
en representación de cada integrante de UMICH dar las gracias, animarles a no
desmayar en el trabajo con la niñez, entendiendo que cada pequeña vida es una
ventana de oportunidad para formar nuevos líderes, pastores, misioneros... y lo
más importante la oportunidad de ganar un HIJO DE DIOS.
“…pero una
cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está
adelante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece
mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús” Fil. 3:13.
Estás en el
lugar correcto no dejes de “restaurar los escombros de antaño; reparar las
ciudades en ruinas, y los escombros de MUCHAS GENERACIONES” Is. 61:4.
Y toma este
2014 como un nuevo año de oportunidades y desafíos para extender el reino de
Dios y “abrir zurcos en terrenos no labrados” Jer. 4:3.
¡MUCHAS
BENDICIONES PARA ESTE AÑO 2014!
Carol
Espinaza
Directora
UMICH